El cabello nasal actúa como un filtro, atrapando polvo, polen y otras partículas en el aire antes de que puedan alcanzar los pulmones. También ayuda a humidificar el aire que respiramos.
Si bien algunas personas eligen recortar o eliminar el cabello nasal por razones estéticas, generalmente no se recomienda afeitarlo. El afeitado puede irritar la delicada piel dentro de la nariz y aumentar el riesgo de infección.
Si le preocupa la apariencia del cabello nasal, puede intentar usar unas tijeras pequeñas y rectas para recortarlo. Es mejor evitar usar objetos afilados y tener mucho cuidado de no cortarte.
En última instancia, si eliminar o no el cabello nasal es una decisión personal.