* La genética es compleja: El color del cabello y el color de los ojos están determinados por múltiples genes, no solo uno. Cada padre aporta una copia de cada gen a su hijo.
* genes recesivos: Algunos genes son dominantes, lo que significa que expresarán su rasgo incluso si la otra copia es diferente. Otros son recesivos, lo que requiere que se expresen dos copias del mismo gen.
* Combinaciones desconocidas: No conocemos los genes específicos que llevan los padres, solo su apariencia externa. Pueden transportar genes recesivos para el color del cabello o el color de los ojos que no son visibles en su propio fenotipo.
Para dar una probabilidad más precisa, necesitaríamos:
* Historia familiar: Saber si los abuelos u otros parientes tenían cabello rojo o ojos azules pueden proporcionar pistas sobre las combinaciones de genes de los padres.
* Prueba genética: Las pruebas de ADN podrían revelar los genes específicos que lleva cada padre, lo que permite un cálculo más preciso de los rasgos potenciales del niño.
En resumen, ¡no hay una respuesta simple! Existen muchas posibilidades, y las posibilidades de que un niño herede el cabello rojo y los ojos azules puedan variar mucho.