Cuando su vejiga esté a medio llenada, ya comenzará a sentir la necesidad de ir al baño. Como la mayoría de ustedes saben, esto podría llevarlo a una situación incómoda cuando no hay tiempo ni lugar disponible. Afortunadamente, hay algunos trucos para ayudarte.
El lado brillante El equipo reunió 9 formas de ayudarlo a llegar al baño justo a tiempo. Hemos preparado una función de bono que explica cómo entrenar su vejiga al final del artículo.
Una acumulación de gas en sus intestinos puede ejercer presión adicional sobre su vejiga. Aliviar esta presión al pasar el gas puede hacer que se sienta más cómodo y permitirle aguantar en la orina por más tiempo.
La forma en que posiciona su cuerpo puede ayudarlo a apretar los músculos alrededor de su vejiga y hacerle sentir que "sostenerlo" es una posibilidad. No se quede atrás y se siente directamente para aliviar algo de presión sobre la vejiga. Esto puede reducir el impulso de tener que orinar.
Cuando tenga frío, su cuerpo reaccionará a la caída de la temperatura. Una de las consecuencias es que se producirá más pis. Entonces, cuando ya tenga la necesidad de orinar, cúbralos con mantas o suba el calor.
Según este estudio, la presión sobre su vejiga cae progresivamente cuando está acostada en comparación con una posición vertical. Cuando se ponga de pie, usará sus abdominales para sostener su postura y el peso del pipí también presionará la vejiga.
La uretra es el tubo que lleva tu orina fuera de tu cuerpo. Puede apretar este tubo ligeramente cruzando las piernas. Asegúrese de cruzarlos mientras está de pie, ya que en una posición sentada, solo podría provocar más presión sobre la vejiga.
Al reírse bien, tus músculos centrales se tensarán, ejerciendo presión sobre la vejiga. Sin embargo, el músculo del esfínter, que cierra la uretra para evitar la fuga, se relaja con esta mayor presión y es cuando se produce la orina. ¡Entonces es mejor que intentes evitar risas cuando tengas la necesidad de orinar!
Cuando su vejiga está más o menos medio llena, los nervios en la vejiga le dirán al cerebro que es hora de irse. Esta necesidad de orinar puede ser menos urgente de lo que parece, por lo que una distracción podría anular el impulso de orinar por un tiempo. Entonces, la próxima vez, trate de pensar en otra cosa o desplazarse por su teléfono un poco y verá que la sensación desaparece.
El control de la vejiga depende de los músculos del piso pélvico que son los músculos alrededor de su tubo de orina. Apretar las nalgas juntas varias veces es un ejercicio rápido para apretar esos músculos que pueden ayudar a sostener la orina dentro de la vejiga, evitando las fugas. Puede hacer esto en cualquier posición, de pie o sentado.
El mismo fenómeno que se explicó anteriormente puede suceder cuando nadas en agua fría. Sin embargo, sugerimos mantenerse fuera del agua por completo porque al salir de un baño tibio, ir a un lugar más frío puede darle un deseo abrumador de orinar.
Algunas personas necesitan descansos de baño más frecuentes que otras. Pero esto puede deberse a que te has enseñado algunos malos hábitos que, lo creas o no, pueden revertirse. Pruebe esta técnica de entrenamiento de vejiga paso a paso:
¿Alguna vez has estado en una situación en la que podrías haber usado estos consejos? ¿Tiene alguna técnica original propia que le gustaría compartir?